Mallas de Refuerzo

Las mallas de refuerzo son un componente esencial en los sistemas de aislamiento térmico SATE, asegurando durabilidad y estabilidad en las fachadas. Diseñadas para soportar tensiones y evitar fisuras en las capas de revestimiento, nuestras mallas de refuerzo están compuestas de fibra de vidrio y ofrecen una excelente resistencia mecánica, alargando la vida útil de la fachada y proporcionando un acabado uniforme y resistente.

Tipos de Mallas

Preguntas Frecuentes

¿Para qué sirven las mallas de refuerzo en un sistema SATE?

Las mallas de refuerzo tienen la función de distribuir uniformemente las tensiones dentro del revestimiento, evitando fisuras y posibles desprendimientos. Actúan como un esqueleto estructural dentro de las capas de mortero, aportando estabilidad y durabilidad al sistema SATE en toda su superficie.

Las mallas de refuerzo garantizan la longevidad del sistema SATE al mejorar la resistencia ante cambios de temperatura, movimientos estructurales y otros factores ambientales. Esto se traduce en un menor mantenimiento a largo plazo, mayor durabilidad de la fachada y una apariencia sin fisuras. Además, protegen el sistema de aislamiento térmico de posibles daños, ayudando a mantener el confort térmico en el interior del edificio.

La elección de la malla depende de la ubicación y las necesidades específicas del proyecto. En áreas menos expuestas, las mallas estándar son suficientes. Sin embargo, en zonas de alta tensión como esquinas, se recomiendan las mallas reforzadas para una protección adicional. Nuestro equipo está disponible para asesorarte en la selección de la malla de refuerzo ideal según tus necesidades específicas.

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